En el proyecto PIROPLAX se ha desarrollado una tecnología integral basada en la pirólisis para el reciclado químico de mezclas de residuos plásticos -de difícil separación-. Una mejora en la tasa de reciclabilidad de plásticos contribuye favorablemente a reducir los vertidos y a reducir la dependencia en recursos fósiles debido al reaprovechamiento del plástico como materia prima. Esto es, al pirolizar mezclas de residuo plástico se obtiene una corriente rica en compuestos compuestos aromáticos tipo benceno, tolueno y xileno sustituidos (BTX) que sirven como precursores de nuevos plásticos, resinas, y disolventes. Previamente se han identificado las condiciones de operación que garantizan la máxima selectividad hacia la formación de BTX, tales como tamaño de partícula, temperatura, rampa de calentamiento, atmósfera y tiempo de residencia.
El proceso incorpora además etapas intermedias de separación y tratamiento catalítico para maximizar la corriente de BTX por medio de la transformación de otros productos de menor interés en este caso: olefinas y naftas, que se transforman en BTX por ciclación e hidroreformado catalíticos, respectivamente. El crudo final de pirólisis es recogido y caracterizado para evaluar su calidad, determinando las necesidades posteriores de refino y purificación (por destilación) para su aprovechamiento y aplicación.

En base a los rendimientos obtenidos en el proyecto se ha evaluado la viabilidad tecno-económica del proceso para su escalado a nivel industrial/comercial, tomando para ello como referencia una planta modelo de capacidad diaria de 45 TPD. Esta capacidad daría salida a un tercio del residuo plástico recolectado anualmente por la población navarra, cifrado en 37,000 ton de residuo plástico procesado al año[1][2]. Para esta planta el CAPEX estimado ha sido de 19 M€, los costes anuales de operación de 10 M€/año, y el coste por tonelada de corriente BTX producida de 511 €/t. Este coste de producción estaría por debajo de corrientes vírgenes de mezclas BTX, que oscila los 650 €/t, aunque depende del precio del barril (~$60/barrel). El desglose del LPC (coste de producción nivelado) en sus diferentes partidas muestra que el mayor impacto en el coste de producción es la adquisición del residuo plástico. La inversión de la planta, por su parte, representa el 12%.

[1] Plastics Europe. Plásticos, situación en 2020 [web en línea]: https://plasticseurope.org/es/wp-content/uploads/sites/4/2021/11/ES_Plastics_the_facts-WEB-2020_May21_final_updatedJuly2021.pdf [Último vistazo a 08/04/2025].
[2] RESUMEN INVENTARIOS DE RESIDUOS. Oficina de Prevención de Residuos y de Impulso a la Economía Circular. Gobierno de Navarra